Camino de Maun había algo que me preocupaba: los leones. Poblaciones separadas por largas distancias, carreteras con poco tráfico... desde el primer momento he ido informándome.
-Hasta Nata no hay problema, sólo verás elefantes. Una vez allí pregunta.
-Hasta Nata no hay problema, sólo verás elefantes. Una vez allí pregunta.
Antes de llegar a Nata
ya veo las señales de tráfico avisando del posible encuentro con los elefantes,
pero éstos no aparecen, sí sus boñigas. Me detengo a sacar una fotografía al
menos de su rastro. Al acercarme a los excrementos oigo cencerros, una manada
de unas 20 vacas corren en desbandada hacia mí y cruzan la carretera. Algo las
ha asustado y no espero a comprobar que es, subo a la bici y salgo pitando.
Miro para atrás, esperando ver un león dando caza al ganado, pero nadie las
sigue.
En Nata me dicen que hasta Gweta sólo elefantes, a partir de allí hay leones en el parque nacional. Y en Gweta me ASEGURAN que los leones NO se acercan a la carretera y menos en las horas de más calor, cuando pasan el tiempo sesteando.
-Sólo encontrarás elefantes. Cuando te vean moverán las orejas, tú sigue adelante sin parar.
Pues finalmente no aparecen los leones y en cuanto a los elefantes únicamente veo un macho solitario dándome la espalda. Alcéfalos, algunos avestruces, una jirafa, un par de cebras... y muchas vacas y burros. Y lo único que me ha atacado ya sabéis lo que ha sido.
Que sí, que lo sabéis.
En Nata me dicen que hasta Gweta sólo elefantes, a partir de allí hay leones en el parque nacional. Y en Gweta me ASEGURAN que los leones NO se acercan a la carretera y menos en las horas de más calor, cuando pasan el tiempo sesteando.
-Sólo encontrarás elefantes. Cuando te vean moverán las orejas, tú sigue adelante sin parar.
Pues finalmente no aparecen los leones y en cuanto a los elefantes únicamente veo un macho solitario dándome la espalda. Alcéfalos, algunos avestruces, una jirafa, un par de cebras... y muchas vacas y burros. Y lo único que me ha atacado ya sabéis lo que ha sido.
Que sí, que lo sabéis.
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La pula es la moneda botsuana, que significa lluvia. Lo que escasea se aprecia más.
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Hasta Francistown tengo carretera propia.
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Este ganadero me dice que por sus tierras pasan elefantes.
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¡Salvado! Ya se hacía tarde para comer.
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Francistown.
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Peluquería de caballeros.
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Para pernoctar en los pueblitos del camino voy a la policía y ellos me encuentran sitio.
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Niños de Nata.
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Los aseos.
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Un termitero de unos tres metros, aunque los hay aún más altos.
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Sin rastro de elefantes.
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Terrenos áridos.
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O inundados.
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La hora de comer.
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Gweta.
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Pasando el día en Gweta.
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La prueba de que los elefantes existen.
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El cielo del Kalahari.
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¡Ahí está!
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En
Phuduhudu la policía me busca un sitio para que acampe, en una especie de patio
comunitario rodeado de viviendas. Paseando por el pueblo una veintena de niños
me siguen. Les llama la atención el vello de mis manos y piernas y cuando cogen
confianza me acarician como a un gatito.
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Tienda de barrio.
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El "supermercado" de Xhana a la sombra de un árbol.
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Chanoga. Acercándome a Maun.
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